Asegura que fue coaccionada. Hemos descubierto que su informe médico está manipulado
El 21 de mayo de 1987 no es una fecha señalada en el calendario pero para María, es el día en que perdió a su hija. Tenía 20 años y su familia no le apoyó cuando se quedó embarazada, así que pasó toda su gestación en un centro religioso para madres jóvenes. Cuando llegó el día del parto ingresó en el Hospital San Juan de Dios de Alicante, ahí comenzó su angustia. María afirma que se sintió coaccionada al firmar la entrega de su hija en adopción.
María entregó a su hija en adopción hace 23 años. Vídeo: Informativos Telecinco
"Sólo pasaron dos días, yo estaba aturdida y no sabía ni lo que estaba haciendo", dice María con lágrimas en los ojos.
Ahora María lleva años de búsqueda, sabe que la ley no la ayuda, porque en el caso de madres e hijos biológicos, la ley desde 1999 da derecho a un hijo a buscar a su madre, pero no al revés.
La hemos querido acompañar en su búsqueda. El primer paso es echar una instancia en la Consejería de bienestar Social para que si su hija la busca, crucen datos y las puedan poner en contacto.
Pero mientras cruza los dedos para que esto ocurra, acude al Registro de Salud Pública de Alicante, allí pide su historial médico. Y es cuando viene la sorpresa. Está manipulado.
Una doble referencia de historial expone que María dio a luz a una niña allí a la 1:30 de la madrugada, pero también dio a luz una tal Amalia, el mismo día a la misma hora.
Así que si la hija de María quisiese saber quién es su madre, siempre daría con esa Amalia, nunca aparecería María. Hemos investigado y se trata de una mujer con los apellidos cambiados, pero que el nombre de pila y primer apellido corresponden a una trabajadora social que atendió a María en 1987.
Trabajadores de aquella época nos aseguran que era común manipular los apellidos.
Según Enrique Vila, abogado y fundador de la asociación 'SOS Raíces' ( www.bufetevila.blogspot.com) que se dedica a buscar los orígenes de hijos adoptados, "el 80% de las madres de aquella época eran coaccionadas".
Las trabas administrativas son enormes para encontrar las raíces de un hijo adoptado. El propio Enrique lo es, nació en una institución religiosa y la Iglesia asegura que esos archivos fueron destruidos.
Ha recogido en un libro, 'Bastardos', muchos casos como el de María, "hay madres a las que decían que sus hijos habían muerto, incluso les enseñaban fetos que no eran suyos" comenta el abogado.
Para María sacar a la luz su caso es muy importante, piensa que si su hija la ve, tal vez quiera ponerse en contacto con ella. Asegura que si la encuentra, simplemente, la abrazará.
Fuente: http://www.telecinco.es/informativos/reporteros/noticia/100020883/Busco%20a%20mi%20hija
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