La nueva Miss Tíbet 2010 fue coronada en una brillante ceremonia en Dharamsala, India, el 4 de junio pasado; a pesar de que el concurso de belleza había sido criticado por comentaristas como "no-tibetano".
Tenzin Norzom, de 23 años, fue elegida ganadora entre otras cuatro jóvenes aspirantes. Al comienzo del concurso se anotaron 15 señoritas, pero la mayoría se retiró debido a la presión de familiares y amigos que se oponían al concurso.
La controversia ha rodeado el certamen desde que se inició en 2002. Los críticos afirman que promueve el exhibicionismo occidental y viola la cultura tibetana, que valora la modestia. El gobierno tibetano en el exilio también se ha pronunciado en contra, asegurando que el concurso es ajeno a la tradición del país.
Sin embargo, miles de personas asistieron a la coronación en el Instituto Tibetano de Artes Escénicas de Dharamsala, el 4 de junio.
"Voy a usar el título de promover la causa tibetana en todo lo que pueda", le aseguró Norzom a los periodistas después de ser coronada.
"Mi sueño se ha cumplido. Voy a tratar de ser un modelo a seguir para las generaciones más jóvenes y alentar a otras jóvenes tibetanas de participar en concursos como éste para decirle al mundo que no nos falta confianza".
Nacida en el asentamiento tibetano Hunsur al sur de la India, Norzom acaba de completar el equivalente a una licenciatura en Artes por la Universidad Central de Estudios Tibetanos en Varanasi. Ella habla fluido tibetano, inglés, e hindi. Le gusta leer, escuchar música y practicar bádminton.
En la final, las cuatro concursantes compitieron en áreas de presentación, vestimenta, entrevista, y traje tradicional. Al comienzo del concurso también hubo una ronda en traje de baño, algo que fue visto con desaprobación por muchos en la comunidad de exiliados y un anatema para los ideales budistas.
Según la página web del certamen, el evento pone al ganador "en una excelente posición para hablar de la situación del Tíbet en foros internacionales, llamando la atención sobre la difícil situación del pueblo tibetano, así como el brillo del estilo de vida y cultura".
El objetivo del certamen es "apoyar a las jóvenes mujeres tibetanas modernas y contemporáneas", dice el sitio web.
El régimen chino también desaprueba el certamen. Lo ve como un símbolo de la independencia y la rebeldía contra el régimen chino. El régimen ha presionado con éxito a los concursos internacionales para colocar a las concursantes Miss Tíbet una banda con la inscripción "Miss Tíbet-China". Varias ganadoras de Miss Tíbet han preferido renunciar a las competiciones internacionales a usar la banda de Miss Tíbet-China.
Cada año en el certamen, se otorga el "Premio al Espíritu Libre" a un tibetano que ha contribuido a la paz mundial y a la libertad para el Tíbet del régimen chino. El premio 2010 le fue entregado a Mahesh Yadav por sus retratos de sangre de los líderes mundiales para crear conciencia sobre la causa tibetana. En lo que él llama "Movimiento de Sangre por un Tíbet Libre", el activista por la paz ha estado haciendo retratos con su propia sangre durante los últimos 14 años.
Norzom recibió 100.000 rupias (US$ 2.148) como beca. Otros dos participantes recibieron 50.000 rupias (US$ 1.074) y 25.000 rupias (US$ 537) respectivamente.
Aunque en general el cierre del evento se celebra con pirotecnia, este año se finalizó con una breve plegaria en memoria de quienes murieron en el terremoto del Tíbet en abril. El concurso donó 10.000 rupias (US$ 215) a la las víctimas del terremoto.
El certamen está patrocinado por Kingfisher, una marca de cerveza, y producido por Lobsang Wangyal Producciones en asociación con el grupo Can & Able, una compañía de entretenimiento con sede en Chandigarh, India.
Sólo cuatro concursantes participaron en certamen de Miss Tíbet el año pasado, mientras que sólo dos tomaron parte en la presentación de 2008.
Fuente: http://www.lagranepoca.com/articles/2010/06/20/4776.html
Comentarios